Los que me seguís por Facebook, Twitter e Instagram sabéis que hace poco ha sido mi cumpleaños y mi hija me regaló un molde estupendo que era imprescindible estrenar así que…excusa perfecta. Los que no tengáis molde hacedlos en capsulas de madalena, sin problema. Para forrarlos utilicé papel de horno que recorté en cuadrados para darles un aspecto más auténtico.
Para preparar los muffins, a diferencia de las madalenas, no necesitamos batir la masa ni guardar tiempos de espera. Con mezclar manualmente es suficiente y…al horno, sin más, sencillos y rápidos. Vamos a por la receta.
Ingredientes (para 16 muffins):
- 230 g. de harina.
- 50 g. de cacao puro (yo uso Valor).
- 150 g. de azúcar.
- 10 g. de impulsor.
- 80 g. de gotas de chocolate.
- 250 g. de yogur griego.
- 80 ml. de leche.
- 2 huevos.
Cierto es que podía haber renunciado a alguna asignatura y hacerlo todo un poco más llevadero pero, a falta de 2 meses para terminar el curso, no quise hacerlo y así acabé, agotada de jornadas de 16 horas.
Ahora estoy con el curso terminado y aprobado (con nota), sin trabajo y, después de una semana que he ocupado en hacerme una cura de sueño y volver a ser persona, me he sentado para traeros una nueva receta que os va a sorprender.
La sorpresa reside en la salsa. La receta me la dio una compañera de trabajo, Yoli, y, cuando me dijo los ingredientes, pasé de la extrañeza a…”tengo que hacerla”.
Es muy sencilla de elaborar, no se tarda más de 40 minutos pero, como se hace en el horno, nos da plena libertad para hacer otras cosas. Vamos allá.
Ingredientes (para 4 comensales):
- 4 filetes de pechuga de pollo.
- 4 lonchas de jamón de York.
- 4 lonchas de queso Gouda (o uno que funda bien).
- 4 lonchas de bacon ahumado.
- 1 sobre de sopa de cebolla.
- 3 cucharadas de mahonesa.
- 3 cucharadas de mermelada de albaricoque o melocotón.
- 250 ml. de agua.
- Sal y pimienta blanca.
A pesar de que los días amanecen nublados y la lluvia ha hecho acto de presencia, las temperaturas no terminan de ser frías, aún no he necesitado recurrir a ninguna prenda de abrigo y, teniendo en cuenta lo friolera que soy yo, está claro que no hace frío.
No obstante, como en casa nos encantan, yo ya estoy disfrutando de los guisos de cuchara y las legumbres que tan importantes son para una alimentación equilibrada y sana. Ya os he demostrado en alguna ocasión que se pueden preparar platos de legumbre sin necesidad de añadirles grasa, aptos para vegetarianos, ricos en fibra y llenos de sabor.
He de reconocer que desde que tengo las cocotte de Le Creuset, disfruto muchísimo más de las legumbres hechas a fuego lento. Estas concretamente, se terminan en la propia cocotte al horno y el resultado es un espectáculo.
Ingredientes (para 4 comensales):
- 400 gr. de alubias blancas.
- 1 cebolla.
- 1 puñado de pasas.
- 2 manzanas.
- 2 cucharadas de miel.
- 1 cucharada de mostaza de Dijon.
- 1 cucharadita de curry.
- Aceite de oliva, sal, pimienta y cayena molida.
Estos panecillos son una maravilla. Ideales para un bocadillo a media mañana, meriendas, desayunos…Admiten relleno dulce o salado, lo que prefiráis puesto que el resultado final es un sabor bastante neutro y le queda bien lo que queráis poner dentro.
La masa es elástica y sale genial sin necesidad de enharinar la encimera en exceso, fácil de trabajar con ella para darles la forma y el resultado son unos panecillos tiernos, esponjosos y además se conservan estupendamente en un recipiente cerrado durante varios días.
Ingredientes (para 14 pretzel):
- 60 ml. de agua tibia.
- 15 gr. de azúcar./li>
- 25 gr. de levadura fresca de panadería.
- 450 gr. de harina de fuerza.
- 300 gr. de harina normal.
- 370 ml. de agua tibia.
- 50 gr. de manteca de cerdo.
- 8 gr. de sal.
- Agua, bicarbonato y decoración (semillas de amapola, sésamo, lino, orégano…).
Estas patatas están deliciosas. Llevaba muchísimo tiempo con ganas de prepararlas pero, por alguna razón, nunca me ponía manos a la obra. Son facilísimas de hacer, el horno se encarga de casi todo el trabajo y son una guarnición perfecta para un pollo asado, una carne, un pescado con sabor o, si como a Miguel, os gustan las patatas con locura, una delicia para una cenita de fin de semana acompañadas de una ensalada verde.
No os dejéis engañar por el hecho de que lleven ajo, a mí no me gusta demasiado y las patatas me han encantado.
No os dejo cantidades, dependerá todo de cuántas patatas queráis hacer.
Ingredientes:
- Patatas medianas.
- Dientes de ajo.
- Sal en escamas (o sal gorda).
- Pimienta negra recién molida.
- Aceite de oliva.
- Mantequilla.
Elaboración:
Precalentamos el horno a 200º C.
Lo primero será pelar y laminar los ajos. A continuación lavamos las patatas muy bien puesto que las vamos a hacer con su piel. Una vez bien limpias, las secamos con un paño y las ponemos sobre un cucharón para poder cortarlas en rodajas finas sin llegar al final.
El cucharón frenará la hoja del cuchillo y nos facilitará la tarea.
Intercalamos una lámina de ajo cada dos lonchas de patata. Si os gusta mucho el ajo podéis poner más cantidad.
Añadimos un chorrito de aceite de oliva, despacio para que penetre por las aberturas y ponemos sal en escamas y pimienta negra recién molida por encima, dejando también que caiga entre las lonchas de patata.
Encima del todo ponemos mantequilla e introducimos al horno.
Como siempre os digo cada horno es un mundo y también dependerá del tamaño de las patatas pero más o menos en 40 minutos deben estar en su punto.
La piel crujiente y la carne tierna, con mucho sabor, jugosa.
A mi me han encantado y pienso hacerlas más a menudo variando ingredientes, por supuesto.
Jueves….receta dulce, claro que sí. No hay que perder las buenas costumbres.
Antes de la receta comentaros (aunque los que me seguís en Twitter y Facebook ya lo sabréis), que hoy ya he dejado entregada la inscripción para el nuevo curso de Cocina y Gastronomía y continuar los estudios que comencé el año pasado. En esta ocasión he solicitado seis asignaturas (el curso pasado sólo me dieron dos), pero como este año ya soy alumna del centro, espero conseguirlas todas. Voy a estar a tope, con clases por las mañanas y por las tardes y con proyectos “profesionales” pendientes de tomar forma. Cuándo lo pienso creo que me van a faltar horas, espero poder con todo, que los años no perdonan y las obligaciones son muchas. Os iré contando, de momento hasta Octubre, no empezarán las clases.
Vamos con la receta, que es lo que interesa. Os publiqué hace tiempo unas Galletas con vodka al caramelo y hoy os traigo unas madalenas que también llevan este ingrediente. Aunque las galletas conservan más el sabor del licor, estas madalenas resultan muy ricas, jugosas, crujientes con su costra de azúcar y dejan un regusto en el paladar gracias al vodka muy agradable.
Ingredientes:
- 200 gr. de harina.
- 8 gr. de levadura tipo Royal.
- 160 gr. de azúcar glass.
- 150 gr. de mantequilla.
- 30 ml. de vodka al caramelo.
- 4 huevos.
- Azúcar para adornar.