Los quiches pueden ser tan variados como combinaciones de ingredientes queramos usar. Todo consiste en echarle imaginación y poner sabores diversos para que nuestro paladar se recree con ellos.
Para este he usado calabacín que es la parte de verdura, sabemos que no tiene mucho sabor así que no anula el resto de ingredientes, el puerro le da un toque dulce, pavo braseado que le da un gusto de ahumado que enriquece muchísimo el conjunto y más teniendo en cuenta que la fuerza del sabor la da el queso azul.
Son muy fáciles de preparar, ideales para una cena y recomendado para niños ya que podemos conseguir que coman verdura sin que se den demasiada cuenta.
Ingredientes:
- 1 lámina de pasta quebrada (yo uso la congelada de Hacendado).
- 1 calabacín mediano.
- 1 puerro.
- 150 gr. pavo braseado en lonchas un poco gruesas (puede ser cualquier otro).
- 75 gr. de queso azul.
- 200 ml. de nata para cocinar.
- 2 huevos.
- Sal, pimienta y nuez moscada.
- Queso rallado (yo mozzarella).
Esta receta es de las más sencillas que he hecho nunca y con un resultado realmente asombroso. Un guiso bajo en grasas, completo y nutritivo. Un perfecto plato único para una comida muy sana sin renunciar a un gran sabor.
Ingredientes:
- 1 pechuga de pavo.
- 3 zanahorias.
- 3 puerros.
- ½ vaso de vino blanco.
- 1 vaso de caldo de pollo o agua.
- Sal, pimienta y aceite de oliva.