Hoy os traigo una receta dulce, como cada jueves, y a la vez diferente puesto que uno de los ingredientes no es algo habitual en las cocinas a menos que seas un amante del té, me refiero al Té Verde Matcha.
El té Matcha proviene de moler las hojas de té Gyokuro. El Gyokuro es un té que unas semanas antes de recolectarlo lo cubren con cañas de bambú, esto hace que termine de crecer a la sombra y la planta se cargue de clorofila. Una vez procesado el Gyokuro, las hojas se introducen en molinos de piedra a baja revolución que va convirtiendo las hojas en fino polvo, una lata de 30gr. tarda en molerse 1 hora.
El Matcha, tiene un sabor muy intenso, al fin y al cabo son hojas de té trituradas. Se utiliza para la famosa ceremonia de té japonesa y es habitual cocinar con él, así que como tenía en casa una lata procedente de Café Té Arte, aproveché para preparar esta receta intensa en su sabor, de textura esponjosa y que hará las delicias de aquellos que les gusta disfrutar del peculiar sabor del té. Os recomiendo que hagáis una visita a la tienda online de Café Té Arte, encontrareis un surtido de productos increíbles y deliciosos y una atención esmerada.
Ingredientes:
- 400 gr. de harina.
- 1 sobre de levadura seca de panadería.
- 70 gr. de azúcar.
- 3 gr. de sal.
- 20 gr. de mantequilla.
- 1 huevo.
- 75 gr. de nata líquida.
- 170 gr. de leche.
- 2 cucharadas de cacao en polvo sin azúcar (tipo Valor).
- 15 gr. de té verde matcha.
- 4 cucharadas de agua.