Afortunadamente ya estamos en la recta final de las navidades. Ya ha pasado la Nochevieja, hemos recibido el nuevo año y sólo nos queda el Día de Reyes, después, volveremos a la rutina que tanto apetece después de estos desmadres.
Tal como hice después de Nochebuena, hoy os traigo lo que cenamos en casa en Nochevieja. Esta vez era una cena para dos, Miguel y yo, así que no preparamos una gran mesa, cenamos cómodamente como cualquier otra noche pero con productos algo más “especiales”.
Entrantes:
Embutidos ibéricos Joselito y queso manchego curado Gran Capitán.
Carpaccio de salmón con escamas de parmesano y vinagreta al eneldo.
Primer plato:
Buey de mar aderezado con limón y vino Moriles (lo que sobró nos lo bebimos para acompañarlo).
Segundo plato:
Canguro a la plancha, al punto.
Ensalada de lechuga, escarola, maíz, gulas y huevas aliñada con una vinagreta de pera.
Postres:
Dulces navideños.
Debo deciros que el canguro era la gran novedad en la mesa, tiene un sabor algo más fuerte del que podemos degustar en un entrecot de buey, un sabor más intenso a carne y resulta un poco más duro pero sin ser excesivo. A mí, particularmente, me gustó.
Como veis, no hicimos grandes excesos ni me di una paliza en la cocina como hice en Nochebuena, todo lo preparamos casi al momento y así pudimos disfrutar de una tarde y una noche relajada.
A estas alturas todos tenemos claro que las ensaladas no tienen porqué ser siempre frías o de lechugas y hortalizas. Ya os he dejado alguna vez ensaladas templadas, de pasta, de legumbre, de patata… podéis consultarlas aquí.
La que os traigo hoy es una ensalada templada, es decir, parte de los ingredientes están fríos y parte de ellos calientes, la mezcla la convierte en templada. En casa la tomamos como plato único, no necesita nada más, al menos para nosotros.
Ingredientes (para 4 comensales):
- 4 patatas medianas.
- 1 bandeja de gulas.
- 2 aguacates.
- 100 gr. de salmón ahumado.
- 150 gr. de gambas peladas.
- 2 dientes de ajo.
- 1 pizca de guindilla (opcional).
- Aceite de oliva, sal, vinagre y eneldo.
Reconozco que me gusta probarlo todo. Cuando voy a la compra, si veo algo nuevo, no puedo resistirme. El otro día en Lidl vi este paquete de pasta al ajo de oso y lo compré.
Después, en casa, me informé de qué es el ajo de oso y empecé a maquinar la receta que iba a hacer con ella. No me apetecía hacerla con tomate ni con queso, eso ya lo uso en otro tipo de pasta más “normal” y hablando con Miguel decidimos potenciarle el sabor que de por sí ya tiene esta pasta. Este sabor a ajo no es muy intenso, si probáis la pasta simplemente cocida se aprecia un regusto de fondo pero solo eso. Bien, aquí os dejo el resultado de la prueba…muy rica, cualdo vuelvan a tenerla la compraré.
Ingredientes (para 4 comensales):
- 500 gr. de pasta al ajo de oso.
- 200 gr. de gambas crudas peladas.
- 150 gr. de gulas.
- 3 dientes de ajo.
- Aceite de oliva, sal y cayena molida.
Comenzamos la semana con una receta tierra mar con mucho sabor, sencilla, como es habitual y que servirá para una cena sana y algo especial. No tiene apenas elaboración así que podemos prepararla en un momento. Las alcachofas podéis elegir entre cocerlas vosotros mismos o utilizarlas en conserva.
Ingredientes (para 2 comensales):
- 8 corazones de alcachofa ya cocidos.
- 100 gr. de gulas.
- 50 gr. de cecina.
- 2 dientes de ajo.
- Aceite de oliva, sal y cayena en polvo.